¿Sigue siendo la Programación la Clave para Entrar en el Mundo Tech?

En mi experiencia, cuando la gente se acerca al mundo tech, rara vez el objetivo primordial es solo aprender a programar por el mero hecho de hacerlo. Lo que realmente anhelan son las oportunidades que esta industria ofrece: trabajos bien remunerados, con flexibilidad, que permitan la creatividad y aporten una sensación de seguridad y estabilidad a largo plazo.

Aprender a programar es, sin duda, importante, pero creo que el foco debería ampliarse a entender el funcionamiento intrínseco de la industria del software y el valor que aportamos los profesionales.

He visto de cerca cómo la creación de software es solo una pieza de un rompecabezas mucho mayor. La tecnología que usamos a diario, desde pedir comida hasta realizar transacciones bancarias, se apoya en un complejo entramado de empresas y equipos especializados.

Comprender cómo interactúan el frontend, el backend, las operaciones de infraestructura (DevOps) y la arquitectura de sistemas es fundamental para cualquier persona que aspire a crecer en este sector. No trabajamos en silos.

Es innegable el impacto de la inteligencia artificial en nuestra forma de trabajar. Ya vemos cómo facilita la escritura de código en ciertas áreas. Sin embargo, considero que la IA es más una herramienta que un sustituto.

En lugar de temer suplantación, creo que la IA nos impulsa a ser mejores profesionales. Nos permite delegar tareas repetitivas y concentrarnos en la esencia de nuestro trabajo: la concepción de soluciones innovadoras y la construcción de sistemas robustos. La clave está en cómo utilizamos esta nueva capacidad.

Pienso que nuestro valor en la industria va mucho más allá de escribir código. Radica en la capacidad de analizar problemas complejos, diseñar soluciones efectivas y mantener la operatividad de infraestructuras críticas. Somos creadores de herramientas que impactan directamente en la vida de las personas y el funcionamiento de las empresas.

La demanda de profesionales en tecnología sigue en aumento precisamente porque los desafíos son constantes y la innovación es la norma. Siempre habrá nuevos problemas que resolver y nuevas formas de mejorar lo existente.

En mi opinión, si bien la programación sigue siendo una habilidad valiosa, el camino hacia una carrera exitosa en tecnología pasa por una comprensión integral del negocio, la capacidad de solucionar problemas reales y la colaboración efectiva. La IA es un aliado que nos permite enfocarnos en aportar un valor aún mayor.